ESCLAVITUD
Tendrás que asumir el cien por cien de la responsabilidad, porque es así. Y siempre que puedas aceptar el cien por cien de la responsabilidad, te volverás libre, y en ese momento dejara de haber esclavitud en tu mundo.
De hecho, la ira es una esclavitud. Yo no puedo estar disgustado porque no soy esclavo. Llevo años sin estar irritado con alguien, porque no hago a nadie más responsable. Soy libre, entonces, ¿por qué he de estar molesto? Si quiero estar triste, es mi libertad. Si quiero ser feliz, es mi libertad. La libertad no puede tener miedo, tampoco puede estar exasperada. En cuanto sepas que eres tu propio mundo, habrás entrado a una comprensión distinta. Entonces ya no importa nada más... todo lo demás son juegos y excusas.